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Parasha Vezot HaBerajá

וזאת הברכה

Hemos llegado a la última porción de lectura de la Torá, esto está repleto de simbolismos, comenzando con que la parashá lleva por nombre “Vezot haberajá/Esta es la bendición” porque comienza diciendo:

וְזֹאת הַבְּרָכָה, אֲשֶׁר בֵּרַךְ מֹשֶׁה אִישׁ הָאֱלֹהִים–אֶת-בְּנֵי יִשְׂרָאֵל:

33:1 Y ésta es la bendición que Moshé (Moisés), el hombre de Dios, otorgó a los Hijos de Israel antes de su muerte.

Es una bendición terminar de leer la Torá, tratar de entender su significado, rescatar los valores y la sabiduría que en ella se plasma; es por ello que no es extraño que aun un judío promedio por mas laico que sea, guarde un profundo respeto por la Torá, porque ella simboliza nuestra historia, nuestra identidad, nuestros valores, nuestra filosofía de ver la vida y nuestra esencia como judíos en el mundo.

La Torá simboliza también la devoción, el respeto, lo que nos transmitieron nuestros ancestros; representa también cuantas veces la hemos protegido, la hemos guardado y ha sido el único objeto de valor que muchos judíos cargaron cuando fueron echados de sus aldeas y asentamientos.

Es el Pacto que firmamos con Dios y con el mundo; un pacto que se basa en la obediencia, pero no en obediencia ciega, sino una obediencia informada, previamente analizada y llena de significancia; nosotros no solo la leemos, la analizamos, la debatimos ¿y por qué no? Alegóricamente la sacudimos hasta extraer su sabiduría y por medio de ella sentirnos por cohesión parte de todo un pueblo que más que ser un pueblo elegido, somos un pueblo que elije. Que elije caminar bajo su dirección.

Podemos leer frases tan poderosas como:

אַשְׁרֶיךָ יִשְׂרָאֵל מִי כָמוֹךָ, עַם נוֹשַׁע בַּיהוָה, מָגֵן עֶזְרֶךָ, וַאֲשֶׁר-חֶרֶב גַּאֲוָתֶךָ

33:29 Afortunado eres, oh Israel: ¡Quién es como tú! Oh pueblo salvado por El Eterno, el Proveedor de tu ayuda, Quien es la Espada de tu grandeza.

¿Cómo no sentirnos afortunados con tales palabras? Tendríamos que ser muy insensibles para que nos significaran nada como judíos. Somos un pueblo que ha pactado con Dios el serle fiel, porque Él es fiel a nosotros y se ha convertido en nuestro único salvador de tantos intentos de exterminio, ha sido nuestro protector al punto de seguir vivos y hacernos ahora un pueblo fuerte, grande y sabio por su Torá.

La parashá resalta varios hechos importantes que están impregnados en la significancia de la tradición judía, como lo es dar más valor al mensaje que al mensajero. Los judíos conocemos a Moisés como “Moshé rabeinu” (Moshé nuestro rabino), entendiendo así, un modelo donde la palabra rabino viene del termino Rab que significa “mucho”, es decir alguien que sabe mucho de Torá. No obstante, también se entiende que a pesar de ser “rabeinu” sabemos no ha habido hombre más humilde que Moshé (Bamidvar/Números 12:3), esto también nos enseña que tenemos la responsabilidad moral y judía de comprender que entre más Torá hay en uno, más humildad debe haber.

Grande fue Moshé y a pesar de su grandeza, no pudo entrar a la tierra prometida.  La Torá es muy ambigua en cuanto a la naturaleza del error de Moisés. Hay tantas interpretaciones como comentaristas bíblicos. Maimónides por ejemplo explica que el error cometido de Moshé fue enojarse con el pueblo elegido de Dios y hablarle a su gente con dureza. Esto nos enseña también que Moshé era humano y tenía muchos errores también; así es como no lo deificamos y damos más valor al mensaje que al mensajero. No obstante, fue poseedor de una gran dicha… Dios mismo le da sepultura y hace que nadie conozca el lugar exacto para que nosotros como judíos jamás demos culto a la personalidad de nadie, por más que nos parezca grandioso y por consecuencia no hacer de Moshé una religión basada en un hombre. Así es como leemos:

לד,ה וַיָּמָת שָׁם מֹשֶׁה עֶבֶד-יְהוָה, בְּאֶרֶץ מוֹאָב–עַל-פִּי יְהוָה.  לד,ו וַיִּקְבֹּר אֹתוֹ בַגַּי בְּאֶרֶץ מוֹאָב, מוּל בֵּית פְּעוֹר; וְלֹא-יָדַע אִישׁ אֶת-קְבֻרָתוֹ, עַד הַיּוֹם הַזֶּה.  לד,ז וּמֹשֶׁה, בֶּן-מֵאָה וְעֶשְׂרִים שָׁנָה–בְּמֹתוֹ; לֹא-כָהֲתָה עֵינוֹ, וְלֹא-נָס לֵחֹה.  לד,ח וַיִּבְכּוּ בְנֵי יִשְׂרָאֵל אֶת-מֹשֶׁה בְּעַרְבֹת מוֹאָב, שְׁלֹשִׁים יוֹם; וַיִּתְּמוּ, יְמֵי בְכִי אֵבֶל מֹשֶׁה.

34:5 Y Moshé (Moisés), servidor de El Eterno, murió allí, en la tierra de Moab, por la boca de El Eterno. 6 El lo enterró en el valle, en la tierra de Moab, frente a Beit-Peor, y nadie conoce el lugar de su sepultura hasta el día de hoy. 7 Moshé (Moisés) tenía ciento veinte años cuando murió; su ojo no se había opacado y su vigor no había disminuido.

El desenlace de la Torá integra las siguientes palabras:

לד,י וְלֹא-קָם נָבִיא עוֹד בְּיִשְׂרָאֵל, כְּמֹשֶׁה, אֲשֶׁר יְדָעוֹ יְהוָה, פָּנִים אֶל-פָּנִים.  לד,יא לְכָל-הָאֹתֹת וְהַמּוֹפְתִים, אֲשֶׁר שְׁלָחוֹ יְהוָה, לַעֲשׂוֹת, בְּאֶרֶץ מִצְרָיִם–לְפַרְעֹה וּלְכָל-עֲבָדָיו, וּלְכָל-אַרְצוֹ.  לד,יב וּלְכֹל הַיָּד הַחֲזָקָה, וּלְכֹל הַמּוֹרָא הַגָּדוֹל, אֲשֶׁר עָשָׂה מֹשֶׁה, לְעֵינֵי כָּל-יִשְׂרָאֵל.

34:10 Nunca más ha surgido en Israel un profeta como Moshé (Moisés), que había conocido a El Eterno cara a cara, 11 tal como lo evidencian todas las señales y las maravillas que El Eterno le envió para que realizara en la tierra de Egipto, contra el Faraón y todos sus sirvientes y toda su tierra, 12 y que Moshé (Moisés) realizó con mano fuerte y poder temible ante los ojos de todo Israel.

Vaya conclusión tan icónica donde se nos invita a recordar que Moshé fue instrumento del Eterno para liberarnos de la esclavitud, es por eso que en la naturaleza de nuestra propia historia no se permite habitar en un estado de opresión. Egipto en hebreo se dice “Mizraim” que también significa estrecho y en un estrecho es donde se nos oprime y podemos hacer de nuestro alrededor nuestro propio Egipto /Estrecho; dígase nuestro trabajo, nuestros recuerdos, nuestros sentimientos, o cualquier otro acto que oprima nuestro ser. 

Por tanto, no es extraño que la Torá culmine recordándonos que El Eterno nos sacó de Egipto/ Mizraim con mano fuerte y poder temible ante los ojos de todo Israel.

Seamos pues, libres de nuestra propia opresión.

Shabat Shalom

¡¡FUERZA, FUERZA Y NOS FORTALECEREMOS!!

Israel Rocha